Balanceando el reloj de arena

Esta vez, quiero usar la simbología del reloj de arena, que ya he mencionado anteriormente, en que la parte superior, representa el ciclo de formulación estratégica, y, la parte inferior, el ciclo operacional, explicitando que ambas son extremadamente relevantes, Lo que deseo representar con esta figura, concierne a que son igual de importantes, tanto la Formulación Estratégica, como la Implementación, en que el balance scorecard, ( que se ubica en el punto de estrangulamiento), debe actuar como un homeostata, esto es, ser capaz de recoger los lineamientos estrategicos, instrumentalizados en indicadores representativos, Y, a la vez, capturar los datos e información operacional que permite visualizar el estado de dichos indicadores, agregando una dimensión de trazabilidad, de manera de permitir navegar desde los semáforos, hasta el origen causal del estado en que este se encuentra.